Terapia Celular Avanzada
La terapia con células madre mesenquimales en pacientes con diabetes, puede equilibrar los procesos químicos que ocurren en el organismo con la Insulina y la glucosa, de manera que los tejidos tengan el aporte o la cantidad de glucosa necesaria para realizar sus funciones.
Por otro lado, la célula madre mesenquimal es capaz de inducir formación de células pancreáticas nuevas, mejorando el porcentaje de función del páncreas y evitando que continúe su desgaste.
En el caso de la Diabetes mellitus tipo 1, además puede equilibrar el funcionamiento del sistema inmunológico, haciendo más lento el desgaste del páncreas agredido por el sistema de defensa.
El implante de las células se realiza de manera intravenosa (también llamado sistémico), el cual consiste en colocar un suero adecuado a cada paciente en una vena de cualquiera de sus brazos, mientras permanece en un reposet clínico, sin necesidad de hospitalizarse.
Este sistema de implante es muy cómodo y con mínimas molestias, de manera que el paciente puede continuar con sus actividades diarias incluyendo conducir o viajar, una vez que termina el proceso.
Mejora de la utilización de la glucosa por el organismo y del funcionamiento del páncreas, lo cual se refleja con disminución y/o normalización de las pruebas de laboratorio que se miden para evaluar la diabetes (hemoglobina glucosilada, glucosa en ayuno, niveles de insulina en suero y péptido C principalmente
Aumento de energía y resistencia física
Disminución de cantidad y/o dosis de medicamentos que se toma para control de la diabetes
En algunos casos eliminación de los medicamentos que se toman para el control de la diabetes
Mejora en la calidad y aspecto de la piel y cabello
Mejora de la visión borrosa
Mejora en la cicatrización de heridas o úlceras que no sanaban
Mejora de la función del sistema inmunológico
Disminución de ardor en las plantas de los pies y el dolor en las piernas (neuropatías diabéticas)
Disminuye el riesgo o evita la aparición de complicaciones (como pie diabético, insuficiencia renal, hígado graso, coma diabético etc.)
En algunos pacientes pueden desaparecer todos los síntomas y normalizarse sus pruebas de laboratorio por tiempos prolongados.
Es una enfermedad crónica en la cual los órganos del cuerpo no obtienen la sustancia (glucosa) que necesitan para generar energía y continuar con sus funciones, por lo que poco a poco se van deteriorando hasta morir. La falta de glucosa (conocida también como azúcar) en los diferentes órganos y tejidos del cuerpo es debido a que el páncreas deja de producir o disminuye la cantidad de una hormona llamada insulina, que es la encargada de introducir la glucosa (azúcar) al organismo como sucede en la diabetes mellitus tipo 1 y algunos casos de diabetes mellitus tipo 2, o bien el exceso de grasa en el cuerpo, no permite que la hormona insulina entre a las células de los tejidos llevando glucosa (resistencia a la insulina), por lo que la glucosa no ingresa a las células del cuerpo y se concentra en la sangre.
SÍNTOMAS COMUNES
Vista borrosa o con dificultad para enfocar
Sed excesiva
Cansancio constante y fatiga con actividades cotidianas
Orinar frecuentemente
Hambre excesiva
Pérdida de peso inexplicable
Dificultad para ver por la noche
Disminución de la capacidad de percibir sensaciones en la piel
Lesiones o heridas en la piel que no generan dolor y que tardan mucho en cicatrizar.
Infecciones frecuentes o que duran mucho
Disminución o adelgazamiento de los músculos
Pérdida de dientes
Adelgazamiento del cabello y caída excesiva
Piel reseca y frecuentemente con ardor
Ardor en las plantas de los pies y dolor en las piernas
Mareos
Aumento de peso excesivo y aumento de talla principalmente abdominal